Hace poco más de dos meses me he visto en la tesitura de pasar o no por una histerectomía. Pero antes de contaros mi experiencia, os voy a hablar primero sobre los diferentes tipos de Histerectomías.
Porque no solo te encontrarás con nombres que te suenan a chino sino que tu ginecólog@ te puede ofrecer diferentes opciones que debes conocer muy bien.
Tabla de contenidos
Tipos de histerectomía: Una guía completa sobre las opciones quirúrgicas
La histerectomía es un procedimiento quirúrgico comúnmente realizado en mujeres que puede implicar la extracción total o parcial del útero. Esta cirugía se puede realizar por diversas razones, como por ejemplo: miomas uterinos, endometriosis, cáncer de útero o sangrado uterino anormal.
Sin embargo, no todas las histerectomías son iguales. Existen diferentes tipos de histerectomía, cada una con sus propias características y alcances. A continuación, te muestro una pequeña guía sobre los distintos procedimientos quirúrgicos que se pueden llevar a cabo.
Quiero comenzar explicándote, antes de los diferentes tipos de intervenciones, qué clases de histerectomía existen, dependiendo de qué zonas haya que eliminar:
Imagino que tienes claro que la palabra histerectomía se refiere al procedimiento quirúrgico en el cual se retira total o parcialmente el útero. Pero, dependiendo de la extensión de la extracción, se pueden distinguir tres tipos principales de histerectomía: total, parcial y radical. A continuación, te explicaré las diferencias entre cada una de ellas:
Histerectomía total
En este tipo de histerectomía, se extrae tanto el útero como el cuello uterino (también conocido como cérvix). La histerectomía total puede realizarse mediante diferentes técnicas, como la abdominal, vaginal, laparoscópica o asistida por robot. Dependiendo del caso, también puede incluir la extirpación de los ovarios (Ooforectomía) y las trompas de Falopio (Salpingectomía). Este ha sido mi caso, pero eso ya te lo contaré en el próximo artículo para no llenarte de datos. Si en el proceso quirúrgico se ven afectados ovarios y trompas de falopio, debes tener en cuenta que después del primer mes de tu operación, aparecerá lo que se conoce como Menopausia quirúrgica.
Histerectomía parcial (subtotal o supracervical)
En este tipo de histerectomía, se extirpa únicamente la parte superior del útero, dejando intacto el cuello uterino. El cuello uterino se mantiene para preservar la función cervical y evitar posibles complicaciones a largo plazo, como el prolapso vaginal (al final del artículo te dejo un, aunque en el artículo sobre el suelo pélvico ya te expliqué lo que es). Es importante recordar que, a pesar de conservar el cuello uterino, la capacidad reproductiva se ve afectada ya que el útero está parcialmente eliminado.
Histerectomía radical
Este tipo de histerectomía es menos común y se realiza cuando existen condiciones médicas graves, como el cáncer de útero o ciertos tipos de enfermedades ginecológicas avanzadas. Además de la extracción del útero, en una histerectomía radical se retiran también los tejidos circundantes, como parte de la vagina, los ligamentos uterosacros y los ganglios linfáticos pélvicos. Este procedimiento tiene como objetivo eliminar por completo el órgano afectado y prevenir la propagación del cáncer u otra enfermedad grave. En este caso también aparecería, después del primer mes de la intervención, una Menopausia Quirúrgica.
Y, ahora sí, después, de saber qué tipo de histerectomías existen dependiendo de los órganos afectados, te cuento qué abordajes quirúrgicos te puede recomendar tu ginecólog@.
Histerectomía abdominal
En este tipo de histerectomía, se realiza una incisión en el abdomen para acceder al útero y extraerlo. Es el procedimiento más comúnmente realizado y puede ser necesario en casos de que tu médico no sepa exactamente qué es lo que se puede encontrar (como fue mi caso), en enfermedades avanzadas, tumores grandes o cuando existen complicaciones adicionales.
Es la intervención menos bonita estéticamente. Y también la que tiene la recuperación más lenta y dolorosa.
Histerectomía vaginal
En esta variante, la extracción del útero se realiza a través de la vagina, sin necesidad de realizar incisiones en el abdomen. Es una opción menos invasiva y con una recuperación más rápida. Sin embargo, no todos los casos son aptos para este tipo de histerectomía, ya que depende de factores como el tamaño y posición del útero.
Histerectomía laparoscópica
Este enfoque utiliza pequeñas incisiones y la ayuda de una cámara para visualizar el útero y realizar la extracción. Se utilizan instrumentos quirúrgicos especiales para realizar la operación a través de pequeños orificios en el abdomen. Este tipo de histerectomía generalmente ofrece una recuperación más rápida y menos dolorosa, así como una menor pérdida de sangre.
Histerectomía asistida por robot
Esta técnica quirúrgica utiliza un sistema robótico para ayudar al cirujano a realizar la histerectomía. El robot proporciona una mayor precisión y maniobrabilidad a través de pequeñas incisiones en el abdomen. Aunque es un método relativamente nuevo, ha ido ganando popularidad debido a sus beneficios potenciales, como una recuperación más rápida y menos dolorosa.
Te dejo unos cuantos vídeos que me han venido muy bien para prepararme tanto física como psicológicamente para este tipo de intervención quirúrgica:
Es importante destacar que cada caso es único y la elección del tipo de histerectomía dependerá de factores como la condición médica, la edad, la salud en general y las preferencias de la paciente. Antes de tomar cualquier decisión, es fundamental consultar con un especialista ginecólogo, quien podrá evaluar tu situación específica y recomendarte la mejor opción para ti.
Recuerda que la histerectomía es un procedimiento irreversible que puede tener implicaciones físicas y emocionales. Siempre busca una opinión médica calificada y toma el tiempo necesario para comprender y considerar todas las opciones disponibles para tu caso.