Muchas somos las mujeres que, durante la Perimenopausia, cogemos unos cuantos quilos de más y lo que nos cuesta perderlos… Muchas veces, con la finalidad de evitar coger algunas calorías, en lugar de añadir azúcar a ciertos alimentos, apostamos por el uso de Edulcorantes Artificiales que, a veces, perjudican más que ayudan.
Todas estamos de acuerdo en que el azúcar refinado (azúcar blanco) no es saludable, por lo que se han creado diferentes edulcorantes artificiales para imitar su sabor dulce. Pero no es oro todo lo que reluce y hoy voy a intentar explicar los pros y los contras de los Edulcorantes Artificiales.
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Tipos de Edulcorantes Artificiales y sus efectos
Los edulcorantes artificiales o sustitutos del azúcar, son unas sustancias que se usan para reemplazar al azúcar de mesa para endulzar ciertos alimentos y bebidas. Pero, desde hace un tiempo la polémica sobre su seguridad de estas sustancias va en aumento.
El poder edulcorante de estas sustancias es mayor que el del azúcar, por lo que se necesita menos cantidad, y tienen un valor calórico mucho menor que el azúcar.
Por lo que en un principio, estos Edulcorantes Artificiales pueden resultar una interesante ayuda para perder peso.
Pero, desde hace bastante tiempo, se ha levantado una polémica sobre la seguridad de estas sustancias. Para que te hagas una idea, en los años 70 se relacionó la sacarina con un mayor riesgo de sufrir alteraciones metabólicas. Por lo que los Edulcorantes Artificiales no son tan inocuos como puede parecer…
Todos son muy efectivos para estimular los receptores de sabor dulce en la lengua. Incluso, la mayoría son muchísimo más dulces que el azúcar.
Algunos de ellos, como es el caso de la sucralosa, tienen muchas calorías. Pero como la cantidad necesaria para dar el toque dulce a los alimentos es tan pequeña, las calorías que se ingieren son prácticamente insignificantes.
Edulcorantes Artificiales más comunes
Según Wikipedia, los edulcorantes artificiales aprobados por la FDA más usados son los siguientes y su dulzor en comparación con el azúcar es:
- Acesulfamo K – 200× dulzor (por peso)
- Advantame – 20,000 veces más dulce que el azúcar
- Aspartamo – 160–200× dulzor (por peso)
- Glucin – 300× dulzor (por peso)
- Isomalt: 0.45×–0.65× dulzor (por peso)
- Neohesperidina dihidrocalcona Neohesperidina DC : 1500× dulzor (por peso)
- Neotame: 8000× dulzor (por peso)
- Sacarina: 300× dulzor (por peso)
- Sal de aspartame-acesulfame: 350× dulzor (por peso)
- Sucralosa: 600× dulzor (por peso)
Existen otros edulcorantes, que son bajos en calorías, y que se procesan a partir de ingredientes naturales por lo que no se cuentan como «artificiales». Tal es el caso de xilitol , eritritol , sorbitol y manitol.
Qué Efectos sobre el Apetito tienen los Edulcorantes Artificiales
Este tipo de productos que endulzan tu vida desencadenan una liberación de hormonas y otras sustancias químicas del cerebro. Esto es lo que se conoce como «Circuito de recompensa alimentaria«.
Como te muestro en este vídeo, la recompensa alimentaria es muy importante para sentirnos satisfechas después de comer. Y, por si no lo sabías, también incluye algunos circuitos cerebrales como los de los comportamientos adictivos.
Este tipo de edulcorantes le dan un sabor dulce a muchos alimentos y bebidas, pero hay investigadores que piensan que la falta de calorías, impide que se active completamente el circuito de recompensa de los alimentos.
Aunque los edulcorantes artificiales proporcionan un sabor dulce, muchos investigadores creen que la falta de calorías impide la activación completa de la ruta de recompensa de los alimentos.
Con esto quiero decir que la dulzura de estas sustancias bajas en calorías, pueden llevarte a querer comer más, por lo que aumenta la ingesta en otro tipo de alimentos con más calorías.
Aún así, la evidencia no es 100% compartida por todos los investigadores. Porque cada cuerpo puede asimilar este proceso de un modo diferente.
Otro problema que puede provocar el consumo de estos edulcorantes es que al ser tan dulces, pueden fomentar a tener antojos de productos con azúcar. En resumen: Cuantos más alimentos dulces consumas, más vas a querer.
Hay estudios que han encontrado que las bebidas endulzadas artificialmente se han relacionado con un aumento de peso. Otros estudios indican que se asocian con un IMC (índice de masa corporal) más alto, pero no con un mayor peso corporal…
Así que no está demasiado claro que haya una evidencia rigurosa de ese aumento de peso, pues cada persona, como te he dicho, puede asimilar en su organismo los endulzantes de un modo u otro. Por lo que eres tú misma la que debes observar qué efecto producen en ti.
Si usas habitualmente edulcorantes artificiales y estás sana, feliz y te encuentras satisfecha con los resultados que estás logrando, no hay necesidad de cambiar nada.
Sin embargo, si experimentas antojos, un control deficiente del azúcar en la sangre u otros problemas de salud, es muy posible que se deba a la ingesta de estos edulcorantes por lo que es mejor que consultes con tu médico.
